Antes de Papá Noel estaba Nicolás de Bari: la leyenda de un santo ligado a tormentas y milagros
El Papá Noel que conocemos, tan esperado por todos los niños la noche de Nochebuena, es una figura bastante reciente. Antes de él existía un santo protector de los pobres y los niños, San Nicolás, patrón de Bari y de origen turco.

Papá Noel, tal y como lo conocemos, con su trineo tirado por renos y su espesa barba blanca, nació en el siglo XIX. En los años 30 del siglo pasado, esta figura se consolidó aún más gracias a la publicidad. Así, en el imaginario colectivo, ha quedado como un anciano bondadoso con un traje rojo, pero la tradición de la que deriva es mucho más antigua.
Se encuentran vestigios de ello en la mitología nórdica, por ejemplo, y en las costumbres de los pueblos del norte de Europa, según las cuales, con motivo del solsticio de invierno, el dios Odín organizaba una gran cacería y dejaba pequeños regalos a los niños en sus botas.
También en el sur de Europa existían tradiciones relacionadas con el intercambio de regalos en la misma época del año, pero desde la llegada del cristianismo, la figura de San Nicolás de Bari se impuso en la cultura popular como la de un santo capaz de hacer milagros y, sobre todo, de proteger a los niños.
¿Quién fue San Nicolás de Bari?
Nicolás era originario de Licia, una región de la actual Turquía, y fue nombrado obispo de la ciudad portuaria de Myra, también en Turquía. Murió en esta ciudad el 6 de diciembre de 325, pero su culto era especialmente fuerte en Italia, y no solo allí, mucho antes de que su figura se superpusiera a la del moderno Papá Noel.

De hecho, Myra fue conquistada por los musulmanes en el siglo XI y, tras este acontecimiento, tanto Bari como Venecia intentaron llevar las reliquias del santo a Italia.
Sin embargo, parte de sus restos fueron abandonados y posteriormente recuperados por los venecianos, quienes los llevaron a la iglesia donde aún se encuentran, la de San Nicolò al Lido, precisamente en Venecia, convirtiendo a San Nicolás en el copatrono de la ciudad lacustre, junto con San Marcos.
Entre tormentas y demonios
Durante toda la Edad Media, pero también en los siglos posteriores, el santo fue uno de los más venerados, sobre todo porque a su nombre se le atribuían varias leyendas. Si a menudo se le representa con tres esferas de oro, por ejemplo, es porque una de estas historias cuenta cómo el santo había dado dinero en secreto a un hombre pobre durante tres noches seguidas, para que pudiera disponer de la dote para sus tres hijas, salvándolas así de la prostitución.
#SanNicolásdeBari.
— alliveSSevilla (@AllivesSevilla) December 6, 2019
SAN NICOLÁS DE BARI se convirtió en la base de la figura de Papá Noel, Santa Claus o San Nicolás, personaje legendario que, según la cultura y tradición de muchos países, trae regalos a los niños por Navidad (la noche del 24 al 25 de diciembre). pic.twitter.com/zilix935Qq
Otra historia narra cómo San Nicolás resucitó a unos niños horriblemente asesinados por un hombre cruel, o cómo era capaz de calmar las tormentas, salvando la vida de los marineros a merced de las olas.
Una de las leyendas más famosas relacionadas con su nombre cuenta cómo expulsó a un demonio que causaba estragos en los pueblos de montaña y lo convirtió en su sirviente. En realidad, San Nicolás nunca viajó por los Alpes, pero aquí su historia ha echado raíces tan profundas que cada año se celebra el aniversario de su muerte recordando precisamente este episodio.
De ahí surgió la leyenda de los Krampus, muy popular en toda la cordillera alpina oriental, unos demonios que siguen al santo durante la procesión dedicada a él. Además, ese día, San Nicolás reparte regalos a los niños.
¿Cómo "nació" el Papá Noel actual?
Papá Noel, en casi todos los países occidentales, es conocido como Santa Claus, nombre derivado de la contracción de Sanctus Nicolaus, pero si toda la iconografía ha cambiado, al igual que la figura del personaje, transformado de santo cristiano a icono del consumismo, se debe sobre todo al paso de Europa a Estados Unidos.
El día de San Nicolás en Austria, 1934. El folklore alpino y sus criaturas del invierno combinadas con la figura del santo que daría lugar a Papá Noel. El invierno es tiempo de máscaras, fantasmas y demonios, pero también de la luz nacida bajo el umbral del solsticio. pic.twitter.com/UXtGHA6qX8
— 𝕰𝖑 𝕬𝖖𝖚𝖊𝖑𝖆𝖗𝖗𝖊 (@CaminoAquelarre) December 12, 2025
En esta fase se han perdido las partes más oscuras de las leyendas relacionadas con el personaje, como los demonios y el infanticidio, transformándolo en un icono de pura alegría completamente fabuloso.
Eran los años de la guerra civil y el artista estadounidense Thomas Nast creó un personaje inspirado en San Nicolás, que en su imaginación llevaba regalos a los soldados de la Unión en lugar de a los niños. A él se le debe también la idea de la fábrica de regalos en el Polo Norte y el inconfundible traje rojo.
Todas estas características se acentuaron durante una intensa campaña publicitaria de Coca-Cola. Desde entonces, Papá Noel vestido de rojo ha sustituido definitivamente a San Nicolás, pero aunque sus orígenes no sean tan románticos, sigue existiendo la magia de la espera para todos los niños.