¿Qué pasaría si transformaras botellas de plástico en mini invernaderos o comederos para pájaros?
Las botellas de plástico desechables que usamos a diario en grandes cantidades pueden ser útiles en nuestro jardín antes de reciclarlas. ¡Aprenda más sobre este tema con nosotros!

El uso de botellas de plástico en el jardín reduce la producción de residuos, transformándolos en herramientas útiles y económicas. Las botellas tienen numerosos usos en la jardinería y la agricultura sostenible, contribuyendo así a la economía circular.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el uso de estas botellas puede suponer riesgos, como la propagación de microplásticos al suelo, las aguas superficiales y subterráneas. Al exponerse a la intemperie, el plástico se degrada más rápidamente, liberando microfragmentos. Por lo tanto, es importante recordar que las botellas dañadas deben reciclarse.
Sistemas de riego y aire acondicionado
Los usos más conocidos de las botellas en jardinería y agricultura familiar son los relacionados con el riego. Perforando pequeños agujeros, es posible crear un sistema de riego por goteo que libera lentamente pequeñas cantidades de agua, manteniendo la tierra húmeda pero evitando el consumo excesivo de agua.

En este contexto, es posible utilizar una botella de varias maneras, destacándose la perforación de la tapa, que crea una especie de aspersor, la colocación de una botella invertida, sin tapa y parcialmente enterrada, que permite regar las raíces evitando el exceso de humedad superficial, así como el uso de una mecha auto-irrigante, que consiste en utilizar dos mitades de una botella, la inferior con agua y la superior con tierra, unidas por un trozo de tela, la mecha.
Por otro lado, las botellas pueden usarse como mini invernaderos, lo que ayuda a que las plántulas prosperen. Esto ayuda a retener el calor, minimizar los daños causados por el viento y proteger contra la erosión pluvial. Para reducir el estrés térmico en algunas plantas, también es importante distribuir botellas llenas de agua por toda la superficie cultivada, ya que absorben el calor durante el día y lo liberan por la noche.
Jardines verticales y control de la vida silvestre
Las botellas, cortadas con precisión, también se pueden convertir en resistentes maceteros que, al estabilizarse con piedrecitas, pueden embellecer tu jardín, balcón o incluso la pared. En este último caso, si quieres crear un jardín vertical, fija las botellas a un enrejado con abrazaderas o ganchos. Las suculentas son plantas que adoran este tipo de arreglo.

Alternativamente, pueden suspenderse, siempre que se garantice el drenaje. También se puede utilizar la técnica de mecha, conectando dos botellas que, suspendidas, aseguran el riego mediante una mecha.
Las botellas también se pueden usar como comederos o bebederos para pájaros, como espantapájaros para proteger ciertos cultivos o incluso como repelentes de moscas y mosquitos, con resultados no siempre aceptables. Además de las típicas botellas de agua, también se pueden usar botellas de detergente, pulverizadores de limpieza (siempre que no contengan amonio), vasos de yogur y jarras de agua.
En cuanto el plástico muestre signos de degradación, debe reciclarse de inmediato. Si se usa preferiblemente a la sombra, su vida útil se prolongará considerablemente.
Reutilizar botellas en el jardín reduce los residuos, optimiza los recursos y aumenta las posibilidades de cultivo, especialmente en espacios urbanos. Con una buena dosis de creatividad y buenas prácticas de reciclaje, es posible transformar los residuos cotidianos en técnicas beneficiosas para las plantas.