Los 5 hallazgos más impresionantes del rover Curiosity en Marte con más de una década recorriendo suelo extraterrestre
Diseñado para una misión de solo 2 años, el rover Curiosity ya ha superado todas las espectativas con más una década en Marte. Repasamos los 5 hallazgos más impresionantes del pequeño robot sobre suelo marciano.

El rover Curiosity de la NASA se construyó en el Jet Propulsion Laboratory (JPL), gestionado para la agencia por Caltech en Pasadena, California. El JPL gestiona las misiones Curiosity y Mars Reconnaissance Orbiter en nombre de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA en Washington, como parte del Programa de Exploración de Marte de la agencia. La Universidad de Arizona, en Tucson, opera HiRISE, construida por BAE Systems en Boulder, Colorado.
Como parte de la Misión del Laboratorio Científico de Marte (MSL, por sus siglas en inglés) de la NASA, Curiosity, fue el rover más grande y capaz jamás enviado a Marte cuando se lanzó el 26 de noviembre de 2011, y llegó a suelo marciano de manera exitosa en el cráter Gale el 6 de agosto de 2012.
El MSL evalúa si Marte alguna vez tuvo un entorno capaz de albergar vida microbiana. Determinar la habitabilidad pasada del planeta rojo proporciona a la NASA, y a la comunidad científica en general, una mejor comprensión de si pudo haber existido vida en Marte y, de haber existido, una idea de dónde buscarla en el futuro.
1- Marte tuvo agua en estado líquido en su superficie
Uno de los más recientes hallazgos. Curiosity detectó ondulaciones en las rocas del cráter Gale que revela que el agua marciana estuvo en contacto directo con la atmósfera.
Curiosity detectó un conjunto de ondulaciones en 2022, en la región conocida como Prow, un área que alguna vez albergó dunas impulsadas por el viento. El segundo conjunto de ondulaciones, ubicado en la franja rocosa Amapari Marker Band, sugiere que existió un lago de hasta 2 metros de profundidad, pero en una etapa más avanzada del clima marciano.
Un estudio liderado por científicos del Instituto Tecnológico de California, sugiere que hace unos 3700 millones de años, Marte tuvo agua en estado líquido en contacto con su atmósfera. Esto desafía las teorías previas que postulaban que sólo pudo tener hielo sobre su superficie.

En 2014, el rover Curiosity ya había identificado señales de lagos de larga duración, pero su nuevo descubrimiento es la primera prueba de lagos abiertos al aire. Misiones marcianas anteriores, como Opportunity en 2004, habían identificado ondulaciones creadas por agua que fluía, pero no había evidencia clara de lagos abiertos y sin hielo, ahora sí, Curiosity lo ha logrado.
2- Vida en Marte hace millones de años
Un hallazgo reciente del rover Curiosity ha entusiasmado a la comunidad científica, se han identificado las moléculas orgánicas más grandes jamás detectadas en el planeta rojo. Estos nuevos compuestos orgánicos descubiertos contienen 10, 11 y 12 átomos de carbono, lo que ha llevado a los científicos a creer que son fragmentos de ácidos grasos preservados en las muestras del rover.
Anteriormente, Curiosity había identificado moléculas orgánicas más simples en Marte. Sin embargo, los hallazgos de compuestos más complejos como estos marcan un avance significativo. Estas moléculas indican que la química orgánica en Marte podría haber alcanzado el nivel de complejidad necesario para la aparición de vida.
Scientists studying samples aboard the @MarsCuriosity rover have found the largest organic compounds on Mars so far. This raises intriguing possibilities in the search for past life and bodes well for plans to bring @NASAPersevere's samples to Earth. https://t.co/LiXs4y1MZ2 pic.twitter.com/njZgUbd2x7
— NASA Mars (@NASAMars) March 24, 2025
El estudio también ofrece esperanza para encontrar biosignaturas, es decir, moléculas que solo pueden formarse en presencia de vida. Esto es relevante porque hasta ahora se temía que la intensa radiación y oxidación marciana pudieran haber destruido estos compuestos en millones de años.
3- Nubes noctilucentes en el cielo marciano
Nubes teñidas de rojo y verde se desplazan por el cielo marciano en un conjunto de imágenes captadas por el rover Curiosity de la NASA utilizando la Mastcam, su principal conjunto de "ojos". Tomadas durante 16 minutos el 17 de enero de 2025, las imágenes muestran las últimas observaciones de lo que se denominan nubes noctilucentes (del latín "noche brillante"), o nubes crepusculares, teñidas de color por la luz dispersa del sol poniente.
A veces, estas nubes incluso crean un arco iris de colores, produciendo nubes iridiscentes o "nácar". Demasiado tenues para ser vistas a la luz del día, solo son visibles cuando las nubes están especialmente altas y ha caído la tarde.
Las nubes marcianas están hechas de hielo de agua o, a mayores altitudes y temperaturas más bajas, de hielo de dióxido de carbono. La atmósfera de Marte está compuesta en más de un 95% por dióxido de carbono. Estas últimas son las únicas nubes observadas en Marte que producen iridiscencia, y se pueden ver cerca de la parte superior de las nuevas imágenes a una altitud de entre 60 y 80 kilómetros.
4- Los colores del suelo de Marte (¿es el “planeta rojo”?)
A Marte lo conocemos como el planeta rojo, porque de ese color lo vemos en el cielo nocturno desde la Tierra. Sin embargo, con solo taladrar un poco en su interior, en Marte puede asomar colores muy diferentes.

Curiosity a taladrado con éxito unas 49 veces, los sedimentos revelan una gama de colores, desde el rojo almagre hasta el azul grisáceo, reflejando los minerales y fluidos que han entrado en contacto con las antiguas rocas. Esto les permite a los científicos ir más allá de la superficie oxidada que ha estado más expuesta a la radiación cósmica.
5- Clima sin lluvias y con remolinos de polvo captados por Curiosity
En la atmósfera marciana no hay presencia de lluvia, y por eso el polvo se acumula en la superficie del planeta vecino. Los vientos generados por los rayos del Sol que calientan el suelo pueden formar grandes remolinos de viento conocidos como vórtices. Estos son en su mayoría invisibles, pero cuando una vórtice fuerte pasa por encima de una superficie polvorienta, las partículas que levanta revelan su forma.
Una animación hecha con fotos tomadas a lo largo de más de cuatro minutos en el sol 2847 por Curiosity, captó un torbellino a una distancia de entre 1 y 1.5 kilómetros del vehículo. Se puede obsercar perfectamente un torbellino de unos 5 metros de ancho y un altura de por lo menos 50 metros.
Recientemente (abril 2025), el explorador de seis ruedas rover Perseverance, otro de los vehículos robotizados diseñados y fabricados por la NASA, explora en este caso el cráter Jezero de Marte. Perseverance capturó recientemente imágenes de varios remolinos de polvo en el planeta rojo girando en el borde del cráterm y se ve como un torbellino de polvo marciano "devora" a otro más pequeño.