El poder de las arvejas: pequeño en tamaño, grande en beneficios
Las arvejas o guisantes son mucho más que simples judías verdes que se encuentran en ensaladas y sopas. ¡Aprenda un poco más sobre ellos aquí!

Las arvejas (Pisum sativum) son una legumbre ampliamente cultivada y consumida en diversas partes del mundo, valorada tanto por su sabor como por sus beneficios nutricionales.
Con el tiempo, se extendieron por Europa, Asia y, posteriormente, América. Botánicamente, los guisantes pertenecen a la familia Fabaceae, al igual que otras legumbres como los frijoles, las lentejas y los garbanzos.
Cómo consumir las arvejas
Existen dos formas principales de consumirlos: las arvejas verdes, cosechadas cuando aún no están maduras y consumidas frescas o congeladas, y los guisantes secos, que se dejan madurar y se utilizan en sopas, purés y otros platos.
El cultivo del guisante es relativamente sencillo y se adapta a diferentes climas, prefiriendo regiones templadas y suelos bien drenados.
Es una planta anual con un ciclo corto, generalmente de 60 a 90 días, lo que la convierte en una buena opción para la rotación de cultivos.
Otra característica importante es su capacidad para fijar nitrógeno en el suelo mediante simbiosis con bacterias específicas, lo que mejora la fertilidad del suelo y beneficia a los cultivos posteriores.
Principales beneficios de las arvejas
Desde un punto de vista nutricional, las arvejas son un alimento muy completo: rico en proteínas vegetales, fibra, vitaminas del grupo B (especialmente folato), vitamina C y minerales como hierro, fósforo y magnesio, contribuyen a una dieta equilibrada.
Sus fibras contribuyen al buen funcionamiento intestinal y a la regulación del colesterol.
La presencia de antioxidantes, como los flavonoides y la luteína, ayuda a combatir los radicales libres y a prevenir enfermedades crónicas, como las cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer.

La proteína vegetal presente en los guisantes ha ido ganando protagonismo, especialmente con el creciente interés en las dietas vegetarianas y veganas.
Las empresas alimentarias utilizan el aislado de proteína de arvejas como base para la producción de alternativas a la carne, como hamburguesas vegetales y bebidas proteicas, gracias a su buena digestibilidad y valor biológico.
La versatilidad de las arvejas
En la cocina, las arvejas son extremadamente versátiles. Se pueden utilizar en sopas, ensaladas, guisos, risottos, tartas, patés y diversas guarniciones.
Frescas, tienen un sabor dulce y una textura suave. La versión seca, en cambio, requiere más tiempo de cocción, pero es excelente para platos más contundentes, como el tradicional "puré de guisantes" que se sirve con cerdo en muchas culturas europeas.
En términos ambientales, los guisantes representan una opción sostenible, especialmente en comparación con las fuentes de proteína animal.
Su cultivo requiere menos recursos naturales y genera una huella de carbono considerablemente menor. Esto los convierte en un aliado clave en tiempos de preocupación por el cambio climático y la seguridad alimentaria mundial.